viernes, 14 de abril de 2017


Existir en la escritura


"Sigo sin comprender cómo se puede existir siendo notario, como puede uno ser empleado de un despacho, cómo alguien puede levantarse antes de las diez y acostarse antes de la medianoche y me cuestiono seriamente que haya seres en la tierra que se dediquen a algo que no sea alinear frases y buscar adjetivos".
(Carta de Gustavo Flaubert a Louise Collet)


CIELO


  1. Un cielo gris, un cielo de esmalte, casi a oscuras, el día es una prolongada sombra de esa luz de Sol que brilla en tus ojos.

sábado, 8 de abril de 2017

TIEMPO NO-TIEMPO 

¿Tiempo? Sólo un trozo podemos comernos….pero  siempre queremos ese pedazo que está más allá de los puntos cardinales que persigue nuestra mirada buscando hacia donde señalan tus dedos.
¿Tiempo? La vida y todo lo que en ella juega sin él, es un cuadro de naturaleza muerta.
¿Tiempo y no-tiempo? Regresión paradójica, incertidumbre de lo dual donde encierra los diez mil rostros el ser y del no-ser.
¿No-Tiempo? Un delirio, una invención, a veces un nombre, basta, incluso cualquiera que esté escrito como un graffiti en la pared.
¿Tiempo? Residencia de lo anónimo, donde se le da cuerda al reloj de los hechos y los días
¿Tiempo? Una conspiración de las apariencias, suma progresiva de realidades y ficciones.
¿No-Tiempo? La catarata de lo sucesivo, restándose a sí mismo, ante el hecho indudable de lo finito.
¿Tiempo? Un guardia siempre  al acecho en los cruces de.la.vida.             
¿No-tiempo? Los antiguos creían que el destino estaba escrito y con solo cambiando una línea bastaba para empezar un nuevo tiempo y señalar otro camino donde dejar sus huesos sudar el polvo del olvido.

¿Tiempo?  Ir a gritarle al oído sordo del devenir, como el peregrino que en vano trata de conmover con sus plegarias la estatua de mármol con oídos de piedra y su mirada falsa. 
#tiempo 
#existencia 
#espera


MILAGRO...


Milagro....a veces nos empeñamos en buscar señales reveladoras donde no las hay..
Incapaz de hacer aparecer ni en el tercero, ni en el séptimo, ni en ningún otro día a ese cuerpo que con su partida nos dejó a la mitad, pero que ocupa todo el territorio de nuestra mente, de lo pensado y lo sentido, donde su ausencia se vuelve falaz e hiriente como una espada que danza por los aires.

Milagro…..


Sólo un poco de tiempo pedí, hacia adelante o hacia atrás de esa historia, no importaba 
Milagro.... que pudiera encontrar como en los mapas de los tesoros escondidos donde  está marcado con una equis el lugar de aquello que ya no existe.
#milagro

lunes, 3 de abril de 2017


FANTASÍA


La filosofía parece ocuparse sólo de la verdad, pero quizá no diga más que fantasías, y la literatura parece ocuparse sólo de fantasías, pero quizá diga la verdad. (Antonio Tabucchi / Sostiene Pereira)

domingo, 2 de abril de 2017


Somos apolíneos o dionisiacos según Nietzsche

Mucho antes que Freud utilizara personajes de la literatura griega como paradigmas para postular la definición de algunos complejos  de los que posteriormente se ocuparía el psicoanálisis –caso del complejo de Edipo-, el filósofo Friedrich Nietzsche ejerciendo una suerte de psicología preliminar, se permitió establecer una dualidad entre dos dioses de la mitología: Dionisios y Apolo, para definir lo que él denominó los principales fundamentos del carácter humano, con los que divide a los hombres entre dionisiacos y apolíneos.


En  "El nacimiento de la tragedia”,  Nietzsche indica que los apolíneos son aquellos  promotores  o seguidores de una estética de la existencia, buscadores  de la armonía, lo bello, el equilibrio y la razón, mientras que los dionisiacos son cultores del vino, sensuales, proclives al desenfreno, la lujuria,  las pasiones y lo efímero que transitan en las emociones. De esta manera el autor del ”Anticristo” y “Así Hablaba Zaratrusta”, toma estos dos temperamentos diametralmente opuestos y los hace parte de su  definición de las personalidades, inherentes a la vida,  e imprescindibles en toda creación dramática.

Según Nietzsche algunos somos psíquicamente hijos de la ebriedad de Dionisios  los valores de la vida, o de la quietud del sueño reparador de Apolo, residencia de las valoraciones y accionar de la razón. Ambos indudablemente afectan su referencia sobre la realidad, uno por la visión fantasiosa producto de todo sueño, incluso el mítico reparador de Apolo; otro por su obligada mirada hacia el estado de ebriedad (especie de éxtasis de irrealidad) de Dionisios.  La lucha entre ambos representa el juego trágico en que consiste el mundo: entre la vida y la muerte.



Freud logró implantar su complejo de Edipo (personaje de una tragedia de Sófocles) para referirse a ese vínculo psíquico que pueden sufrir algunos hombres en su adolescencia al mantener un vínculo de sobredependencia afectiva con su madre, y que entrañaría una especie de enamoramiento ideal  en este sentido. Pese a la lucidez de su planteamiento y la amplia posibilidad que pudo tener su postulado al describir realidades psiquicas, el concepto de lo apolíneo y lo dionisiaco de Nietzsche quedó  como un axioma filosófico y una visión literaria de la vida, con toda la plenitud y la tragedia que esto conlleva.

Según ésta concepción nietzscheana nos mantenemos en el templo de lo real y lo carnal, en el flujo de la vida y su arrebato sujetados a Dionisios, mientras lo sublime del pensamiento, lo ideal, las cosas del alma y sus sentimientos son nuestros vínculos con Apolo. Todo ser humano está sujeto a esta ambivalencia, a esta dualidad, sólo que siempre -como toda relación bipolar- cuando se rompe el equilibrio predomina un extremo más que al otro, y ocurre ese insalvable diálogo a distancia entre la idea y el cuerpo.
#Nietzsche #apolíneo #dionisiaco #filosofía
 (D.G).